QUÉ LEO HOY:

QUÉ LEO HOY: Sugerencias, debate, crítica, opinión...

viernes, 3 de abril de 2020

DÍA INTERNACIONAL DEL LIBRO INFANTIL




 Hoy día 2 de abril, coincidiendo con la fecha de nacimiento de Hans Christian Andersen, se celebra el Día Internacional del Libro Infantil y Juvenil. Una fecha perfecta para recuperar lecturas que despertaron en nosotros algo más que divertimento y para preocuparnos de que los pequeños que están a nuestro alrededor obtengan, cuanto menos, la posibilidad de tener en sus manos la posibilidad de leer y mejor si pueden elegir.
No siempre somos conscientes de la importancia de una buena lectura para los niños, más ahora que existe una cantidad inmensa de posibilidades, una gran cantidad de escritores, diseñadoras, ilustradores y editoriales que ofrecen un mundo nuevo en cada libro y el verdadero regalo de que los niños puedan disfrutar leyendo y viviendo unas aventuras que son suyas desde el momento en que abren la primera página, o incluso antes, si ya tienen abierta la imaginación y son capaces de dejarse atrapar por las ilustraciones de las portadas.
Las Librerías y las bibliotecas, es una lástima decirlo en un día en que es imposible acudir a ellas, están llenas de libros clásicos y novedades para todas las edades, con una selección que hace años resultaba inimaginable. Basta dedicar unos minutos, dejar que los niños jueguen, abran, observen, toquen y elijan, para que la elección pueda llevarles a escoger el libro adecuado. Eso sí, en muchos casos necesitan un asesoramiento que es fácil de conseguir, pues siempre hay profesionales dispuestos a ayudar tanto a los pequeños como a los mayores que los acompañan.
Y no olvidéis estos últimos, que en vuestra mano está que dichas lecturas puedan ser adecuadas, de vosotros depende el que puedan elegir con total libertad, sin dejarse influir por los falsos cantos de sirenas que aportan en la actualidad libros firmados por niños muy jóvenes a través de las nuevas tecnologías o, lo que es peor, personajes infantiles cuyos libros nunca aparecen firmados.
Basta, en muchas ocasiones, que seamos los adultos los que dediquemos también unos minutos a comprobar qué leen y que deberían leer los niños. Es fácil, cómodo y satisfactorio, pues las editoriales que trabajan el libro infantil y juvenil lo hacen de la mano de muy buenos profesionales, generalmente amantes de la lectura y con una selección muy interesante. Así que lean esos libros y disfruten como mejor les apetezca, pues muchos nos sacarán más de una sonrisa, de una lágrima o cientos de sensaciones que creíamos olvidadas. 
Todos tenemos nuestras lecturas de infancia y adolescencia, libros que en muchas ocasiones todavía se encuentran en las habitaciones que ocupábamos en casa de nuestros padres. Libros que en poco se parecen a los que ahora pueblan las librerías, pero que, en muchas ocasiones, comparten mucho más que los nombres de los escritores. A mi cabeza me vienen imágenes, e incluso frases (puede que el tiempo las haya distorsionado tanto que no se parezcan en nada al original) de los libros que eran entonces mis preferidos, los de aventuras de los grandes clásicos: Julio Verne, Emilio Salgari, Mark Twain, Robert Louis Stevenson... 
Los he vuelto a leer después, con nuevos formatos y traducciones y reconozco que han sido nuevas lecturas, que muchas veces me parecían diferentes al original que creía tener en la cabeza, con más detalles y escenas diferentes. Ya se sabe que la memoria es muy selectiva.
Pero ahora, hoy, ¿qué libro recomendaría? Son muchos los que para los más pequeños se me aparecen en la cabeza desde La vaca puso un huevoLa oveja que vino a cenar, El monstruo de colores, Elmer, hasta El lobo en calzoncillos, mi último gran descubrimiento y es que, debo confesarlo, me divierte, y mucho, leer y releer los libros de los más pequeños. Y, claro está, aunque se trata de un libro para todas la edades, El Principito, por lo que es, lo que significa y lo que me aporta tras cada lectura.
Aunque si hoy tengo que recomendar un libro no es el otro que El roto de Lagarto, un libro que con una sensibilidad especial nos lleva de la mano por esos momentos en los que uno, más en estos que nos ha tocado vivir, siente un roto, un vacío por la pérdida de algo o de alguien verdaderamente importante.

Un libro infantil para todas las edades, de 3 a 103 años de edad rezaba en algún sitio, que ha hecho emocionarse a adultos curtidos y a atender a niños con muy pocos años. Y es que Cristina Rojo, la autora y María José de Diego, la ilustradora en tela,  han construido un libro bello y conmovedor que atrapa desde la primera imagen, desde la primera palabra, hasta la última. Un libro que despide ternura en todas sus páginas y que, por desgracia, cuenta ya con los últimos ejemplares en librerías perdidas. Y para que nadie pueda acusarme de nada, tengo que decir que me enamoró de tal manera nada más verlo que fui uno de los culpables de su edición a través de Millán y Las Heras Ediciones.
   

   

No hay comentarios:

Publicar un comentario